El fuerte viento traído por el tifón puede dañar los módulos fotovoltaicos de la central fotovoltaica. La alta velocidad del viento y el efecto oscilante del viento harán que los módulos fotovoltaicos se agrieten, se deformen o se caigan, afectando así la eficiencia de generación de energía de la central. Las fuertes y continuas lluvias acompañadas de tifones pueden provocar humedad, daños o cortocircuitos en los equipos del interior de la central. En particular, los cables y conectores de la central eléctrica son propensos a la humedad y la corrosión, lo que puede provocar fácilmente fugas o fallos de la central eléctrica. Los tifones también pueden provocar cortes de energía en la red. Una vez que se interrumpe el suministro de energía de la red, la central fotovoltaica no puede transmitir la energía eléctrica generada a la red, lo que provoca el cierre de la central. Además, si la planta de energía fotovoltaica no cuenta con energía de respaldo o equipo de almacenamiento de energía, es posible que no pueda continuar operando durante un corte de energía.
Las sucesivas intrusiones de tifones suponen sin duda una prueba importante para los módulos fotovoltaicos expuestos al aire libre. Ante un tifón, ¿qué conocimientos deben tener los propietarios de centrales fotovoltaicas?
01. Antes de que llegue el tifón, verifique si el equipo de la planta de energía fotovoltaica está en buenas condiciones, especialmente los componentes clave como paquetes de baterías, inversores y cajas de conexiones, y repare o reemplace el equipo dañado a tiempo para garantizar el funcionamiento normal de la planta de energía.
02. Asegurar que las instalaciones fijas de la central fotovoltaica sean firmes y confiables, como los soportes de los paneles solares y la fijación de cables, para reducir el riesgo de ser afectados por tifones. Estos incluyen si los tornillos y sujetadores están apretados firmemente y verificar si los bloques de presión centrales y laterales de la central fotovoltaica están sueltos; fíjelos a tiempo. Además, preste atención a reforzar piezas clave como las instalaciones de almacenamiento de baterías y los lugares de instalación de inversores para evitar que se dañen o destruyan.
Para plantas de energía fotovoltaica instaladas con ganchos y abrazaderas, verifique si los ganchos y las abrazaderas están instalados firmemente. Para una central fotovoltaica instalada en un tejado plano, se pueden utilizar hilos dobles de alambre de hierro de 2 mm2 para unir y fijar los módulos tándem en el lado de barlovento. Para centrales eléctricas con muelles fijos relativamente pequeños, se pueden utilizar sacos de arena, bloques de hormigón, piedras, etc. para aumentar el contrapeso de la central. Las centrales fotovoltaicas sin soportes de protección deben instalarse lo antes posible y fijarse los tirantes a prueba de viento. La central eléctrica terrestre debe apisonar los anclajes de tierra en ambos lados del conjunto a tiempo.
03. Formule planes de emergencia para plantas de energía fotovoltaica, incluidas medidas de respuesta cuando lleguen tifones, arreglos de evacuación de personal, apagado y restauración de equipos, etc. Asegúrese de que los miembros del equipo estén familiarizados con el contenido del plan de emergencia y realice simulacros y capacitación con regularidad.
04. Mantener comunicación y coordinación con compañías eléctricas locales, departamentos gubernamentales y otros propietarios de plantas de energía fotovoltaica, compartir información y recursos, y responder conjuntamente al impacto de los tifones.
05. Después del paso del tifón, verifique el aislamiento y sellado de cada equipo eléctrico en la central fotovoltaica y verifique si los terminales de CA y CC están conectados normalmente. En caso de terreno bajo, nivel de agua alto, inundación de la caja combinadora, etc., la central fotovoltaica terrestre debería intentar retirar el inversor conectado a la red del lugar o trasladarlo a un terreno elevado.
Cuando pasa un tifón, el fuerte viento puede causar presión y vibración en los módulos solares, lo que provoca que se aflojen o dañen la estructura. Especialmente en componentes mal instalados o viejos, el viento puede provocar que los componentes se caigan o se dañen. Las fuertes lluvias provocadas por el tifón pueden provocar que el agua de lluvia erosione la superficie del módulo fotovoltaico, afectando así la capacidad de transmisión de luz y la eficiencia de generación de energía. El agua de lluvia también puede ingresar al interior de los componentes, provocando fallas eléctricas o corrosión de los componentes. Además de tomar precauciones con antelación, también es muy importante elegir un módulo fotovoltaico de alta calidad cuando azota un tifón.
Osda Solar, un proveedor global de soluciones de energía inteligente, los módulos Osda Solar siempre tienen como principio que "la calidad es la principal fuerza productiva". Los módulos de la serie ODA están diseñados con materiales de alta resistencia y estructuras estables, y tienen una excelente resistencia a la presión del viento para garantizar que los módulos permanezcan estables en entornos de viento fuerte. Después de las pruebas en el túnel de viento y el análisis de simulación, la serie ODA está diseñada para operar de manera segura a altas velocidades de viento y resistir eficazmente el impacto del viento. El módulo también pasó la certificación de carga de viento de 2400Pa y la certificación de carga de nieve de 5400Pa, lo que demuestra la capacidad de resistir la carga del viento.
El excelente rendimiento de los módulos Osda Solar frente a los tifones se debe a la búsqueda incansable de la calidad por parte de la empresa. En el futuro, Alder Optoelectronics continuará defendiendo los valores de centrado en el cliente, orientado a la dedicación, mejora continua e innovación continua, y continuará creando productos seguros, eficientes y confiables, creando más valor para los clientes y contribuyendo al Transformación verde de la energía global Una fortaleza sólida.